martes, 14 de noviembre de 2017

Plásticos asesinos de animales

Un trozo de plástico rígido y prácticamente indestructible durante siglos, es capaz de lograr que el caparazón de una tortuga crezca deformado. Se estima que, el animal de la foto quedó enganchado en el mismo cuando era apenas un bebé y su crecimiento se vio influenciado nefastamente, por la imposibilidad de quitárselo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario